Israelí de nacimiento, pero esencialmente venezolana desde hace más de 25 años, deja entrever, en su trabajo plástico, su formación académica en Arquitectura y en Literatura. Sus intereses creativos han navegado entre el grabado, la escultura y la fotografía. Como grabadora ha pulsado todas las posibilidades que ésta disciplina brinda, punta seca, buril,aguatinta, aguafuerte y fotograbado, entre otros. Como escultora, ha explorado el espacio tridimensional a través del metal, la resina, componiendo y uniendo los fragmentos –del espacio, de la memoria–. Como fotógrafa, ha captado atmósferas con planos cerrados, íntimos, pero también abiertos, que recogen la inmensidad de la naturaleza y del paisaje.