Garúa poemas

Luis Castro inscribió su nombre, con pulso firme y letra distinguida, en la plana de exploradores de nuevos continentes poéticos. Pero, hay que advertirlo, con la reciedumbre del que no sólo se contenta con anunciar su hazaña exploradora, sino también con la fatalidad del que se arriesga, la mirada perdida en las llanuras tentadoras e ilímites, a la colonización. Es decir, a quitar el andamiaje, y enseñar, ya, una arquitectura. 
Asistir a la trayectoria de Luis Castro, a su trayectoria poética que fue su vida, es presenciar esa lucha vigorosa, higiénica, deportiva, de un poeta que siente sus músculos capaces de hermanarse en hazañas con los poetas de su tiempo, pero que se finca en la realidad de sus límites; y la alerta, y la sacude.