Poetas venezolanos contemporáneos Tramas cruzadas, destinos comunes

La patria de un escritor no es su lengua, sino ese minúsculo código que ha logrado configurar con ella. Y eso tampoco es una patria, sino apenas una cartografía turbia, siempre en construcción, cuyo fin nadie conoce. La labor del escritor, creemos, consiste en asegurarse de que el mapa nunca se agote. Que no logre definirse finalmente. Que permanezca ignorante de sí mismo. Para que así los viajes, los textos, no se extingan.

La trama que diseñan estas poéticas al cruzarse es un fragmento de ese mapa, un fragmento escaso, un conjunto de voces en equilibrio, siempre a punto de caer, pero que está aquí, innegable, sobre las bases impares de una lengua que cambia constantemente: esa materia inconclusa a la que nos debemos ese país en fuga que cada poeta construye a su manera.

Fragmento de contraportada.